Va de Actos de Discriminación

Hola gente, Os cuento mis últimos disgustos: El pasado 18 de marzo acudí a la convocatoria que hizo el Festival de Cine y Derechos Humanos, en Barcelona, para la realización de una sesión fotográfica y recogida de imágenes para su posterior difusión de la 9ª edición. El encuentro tuvo lugar en la Filmoteca de Cataluña, en las nuevas instalaciones, recién inauguradas, en el barrio del Rabal. Dónde una vez más tuve que comprobar el poco conocimiento y la poca consciencia que se tiene acerca del crear un entorno accesible para todas las personas. La accesibilidad es un derecho, en la Convención de Naciones Unidas sobre los derechos de las personas con diversidad funcional queda recogido en el Artículo 9, donde dice: a) A fin de que las personas con discapacidad puedan/podamos vivir en forma independiente y participar plenamente en todos los aspectos de la vida, los Estados Partes adoptarán medidas pertinentes para asegurar el acceso de las personas con discapacidad, en igualdad de condiciones con las demás, al entorno físico, el transporte, la información y las comunicaciones, incluidos los sistemas y las tecnologías de la información y las comunicaciones, y a otros servicios e instalaciones abiertos al público o de uso público, tanto en zonas urbanas como rurales. Estas medidas, que incluirán la identificación y eliminación de obstáculos y barreras de acceso, se aplicarán, entre otras cosas, a: a. Los edificios, las vías públicas, el transporte y otras instalaciones exteriores e interiores como escuelas, viviendas, instalaciones médicas y lugares de trabajo; b) Los Estados Partes también adoptarán las medidas pertinentes para: a. Desarrollar, promulgar y supervisar la aplicación de normas mínimas y directrices sobre la accesibilidad de las instalaciones y los servicios abiertos al público o de uso público; Me desplazo en silla de ruedas motorizada y no me puedo transferir a una butaca, cosa por la que en esta convocatoria tuve que estar apartada del resto de participantes, y peor aún de las personas con las que fui. Cierto que el fotógrafo Gustaff Choos se esforzó en incluirme en el retrato conjunto, pero hubiera sido más sensato, coherente y justo poder haber participado en igualdad de oportunidad con el resto de los 48 participantes. Y esto hubiera sido posible si las butacas de la sala pudieran quitarse y/o ponerse permitiéndome situar junto al resto. Accesibilidad no es sólo un ascensor amplio y con la botonera adecuada, ni es sólo un lavabo accesible, y mucho menos es tener que quedarte en el pasillo junto al resto de butacas, ¡No! Accesibilidad equivale a flexibilidad y al reconocimiento de la diversidad humana. En este caso quisiera que revisaran sus salas y contemplaran la posibilidad de que donde haya butacas, estas sean de quita y pon, para ceder el puesto a sillas de ruedas cuando convenga. ----------------- El pasado, domingo, 8 de abril de 2012 Este capitulo comienza con un ir a ver La fría luz del día, para deleitarnos con Bruce Willis y el otro cachas que le acompaña en el cartel. Entre risas, parecía un plan fantástico para un domingo por la tarde. Y todo fue placentero hasta que llegamos al cine Comedia, de Pso. De Gracia con Gran Vía y el hombre que recogía las entradas, viéndome, nos preguntó a que sala íbamos. Le contestamos que a la 2 y nos dijo que yo no podía entrar porque para acceder hay cuatro escalones. De repente, el plan dejó de ser divertido. Lo que sucedió a continuación fue que mi familia y el resto de telespectadores pudieron entrar y yo me quedé sola a la espera de que el encargado de turno me diera la hoja de reclamación. Cuando me la dio, intentó argumentarme que en las sala 2 y 3, en las no accesibles, intentan poner las películas menos exitosas, por supuesto eso no me consoló en absoluto. Nosécómo, nientiendoporqué entraron todos y todas, menos yo: Imagino, que por falta de consciencia y de conocimiento, así como de fuerza para hacer valer los derechos humanos. Para acabar, quisiera que habiendo compartido este nefasto capítulo se entienda la dinámica enormemente segregadora que se crea cuando el entorno no es accesible a todas las personas. Y como es de increíblemente humillante quedarse sola ante semejante injusticia. Humillante y devastador. ------------------------------------ Ayer, martes, 22 de mayo de 2012 http://www.gesmarsl.com/quienes-somos.htm “Gesmar es una Sociedad constituida en 1996, que se ha consolidado como una empresa líder en el sector, con un prestigio altamente reconocido. Su objetivo fundamental es la captación de personas dando su opinión para estudios de mercado tanto desde el punto de vista cualitativo como cuantitativo, y cualquier actividad relacionada con los estudios de mercado. Dentro del sector de la investigación de mercados, Gesmar, realiza la actividad denominada Técnicamente “Trabajo de Campo” que consiste en la búsqueda y captación de personas que demandan las empresas de investigación para realizar los estudios de mercado de acuerdo a los criterios previamente establecidos por el cliente. Asimismo, Gesmar invita a todas las personas que estén interesadas en participar en una reunión o estudio expresando libremente su opinión, manifestación o conocimientos profesionales a cambio de una gratificación. Le recuerdo que no se trata de vender nada, simplemente escuchamos opiniones…” Es tan indigno y tan cruel el trato que he recibido hoy por parte de esta empresa, tanto, mucho. El lugar era accesible arquitectónicamente hablando, tenía una rampa que subsanaba un escalón, dos ascensores suficientemente espaciosos y la puerta de entrada automática. A los 5’ de estar en la sala de espera junto a otras personas, ha aparecido una zorra indicando la sala en la que se iba hacer el estudio y a mi me ha frenado con un espera ese no es tu grupo. Me ha conducido a la recepción y me ha empezado a decir que la actividad iba a ser muy de levantarse, de pintar, muy lúdica y creativa. A lo que yo le he contestado que bien, que por mi ningún problema, que no puedo dibujar y pintar en el suelo, pero sí sobre una mesa, y que no me puedo levantar, pero que sí me puedo mover y relacionar. Supongo que la zorra hubiera esperado un ¡Qué lástima no me puedo levantar y hacer como el resto…!, pero como no me ha salido esta respuesta, más bien le he contado que me gusta y dedico mucho tiempo a crear, dibujar, pintar, etc., entonces me ha empezado a decir que no era por mí, por lo que yo pueda o no pueda hacer, sino por el resto del grupo, porque no veía claro que supiera integrarme. En este punto, ya sólo le he dicho que ya no necesitábamos seguir discutiendo. Ha insistido en que cogiera el sobre con los 30€ que pagaban por este estudio y se lo he cogido, pero tal cual me lo han dado, se lo he dado a la primera persona que he visto pidiendo limosna. -------------------------------- Tres sucesos demasiado graves en muy poco tiempo. Emocionalmente me doy cuenta de que estoy demasiado enfadada, y estar demasiado enfadada y triste sé que no es bueno, que me puede llevar a la mezquindad o a la amargura, y ambos extremos son nefastos para seguir batallando. También es cierto que hoy estoy un pelín menos enfadada que ayer, así que a todo pronóstico, con suerte y echando mano de lo bueno de la vida... No quedará impune, ni me quedaré sin encontrar una vía de contención, para que no se repitan estos u otros capítulos discriminatorios. El primer caso me sucedió con dos amigas, las tres denunciamos con cada una su carta. En el segundo caso, al día siguiente me llamó una de mis hermanas con las que iba, primero me habló de lo cotidiano y al poco me dijo que no me había perdido nada y me explicó sus batallitas de gordi (embarazada) en los centros que trabaja, en los que día sí y día también se encuentra el ascensor estropeado. Y en el caso de ayer, fui con AP, y volviendo me aconsejó que la próxima vez que me encuentre con una zorra así, que pida por su superior. Que puede ser igual o peor que ella, o igual no y le cae la de Zeus. Yo en situaciones así me quedo bastante bloqueada, le conté. Ya me gustaría, alguna que otra vez, poner el grito en el cielo y saber montar un pollo in situ, pero no sé, ni me sale. Toca seguir y no parar. Marga