Tweet El Cea: mayo 2015

domingo, 17 de mayo de 2015

Ideas para mejorar Málaga





Esta es una breve e incompleta aportación de César en el ámbito de la movilidad y la accesibilidad ante los próximos comicios a celebrar en Málaga.
Mi único medio de hacer llegar estas reflexiones a los partidos políticos son las redes sociales y mi blog personal. Así que iré al grano no si antes aclarar que mis ideas están francamente subdesarrolladas y en un desorden bastante típico de mi persona.
Me llama la atención que la última ordenanza de accesibilidad para Málaga date de 2004. Algunas leyes han aparecido desde entonces que deben incorporarse a la ordenanza. Pero la inexistencia de una ordenanza no es tan grave como la falta de un plan estratégico global sobre accesibilidad. Dicho plan estratégico daría cierto orden y concierto a las innegables actuaciones de la autoridad local.
En este mismo sentido, pero en el área de movilidad –estrechamente vinculada a la accesibilidad- resulta incomprensible la errática política de acumulación de carriles bici  en ciertos lugares. Extraña más todavía la acumulación de carriles bici, líneas de autobús, metro y construcción de aparcamientos públicos. El ciudadano malagueño no tiene claro lo que se está fomentando de este el ayuntamiento. Se pregunta si la apuesta se decanta por el transporte privado, público, motorizado o sin motorizar.
Por abundar más en el asunto de los carriles bici, se sitúan  en lugares del extrarradio de la ciudad en su mayoría. Bien es verdad  que también existen en sitios céntricos y más “antiguos”.  Sin embargo, no parece lícita la convivencia de la circulación simultánea y en  el mismo lugar  de dichos vehículos y peatones. Esto supone un innegable peligro para ambas partes. Veo la necesidad de de hacer cumplir a vehículos motorizados y a bicicletas el actual código de circulación.
Pero la llave que tiene el ayuntamiento para hacer cumplir la legislación tanto en lo referente a movilidad como a accesibilidad son la inspección, la sanción, y el poder emitir o denegar licencias.  Son necesarias revisiones regulares de edificios, comercios, calles, vehículos de todo tipo (pienso en el taxi) para otorgarles la posibilidad de abrir y mantenerse en funcionamiento para el público.  No hay que tener miedo ni complejos para sancionar a quien no cumpla las normas establecidas por diferentes leyes, haciendo oídos sordos a quienes hablen de un supuesto afán recaudatorio o confiscatorio por parte de la autoridad local.
Hasta llegar a tomar dichas medidas sin riesgo para las fuerzas de seguridad, hay que tener bien barrida la propia casa de uno. Me refiero a que, por ejemplo, nadie pueda echarle en cara al municipio que tal calle no está debidamente dotada de un rebaje con cota cero.
Algún apunte más  señala la prioridad de  señalar correctamente los mapas de la ciudad, tanto para personas con baja visibilidad, ciegas, extranjeras, o con necesidad de iconos. También se aprecia la impericia a la hora de informar a las personas ciegas en los medios de transportes urbanos e interurbanos. Una ciudad que aspira a ser la capital europea de accesibilidad y un referente cultural para el país no puede permitirse carecer de más de una biblioteca pública en el distrito 1, y que la que existe no sea plenamente accesible (calle Ollerías).  Aunque los baches en pasos de peatones como el que va desde la plaza de la Marina al paseo del Parque me resulten sumamente incómodos y evitables, en caso de que favorezcan a alguien,  este estilo de paso de peatones se debería generalizar.  Ciertamente favorecería a las personas  ciegas y con baja visibilidad un cambio general de pavimento y color del mismo.
Gracias por atender estas reflexiones. Suerte en los comicios.

jueves, 7 de mayo de 2015